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Estudiante de jiu-jitsu será indemnizado por $56 millones tras mala técnica aplicada en Estados Unidos: instructor ecuatoriano sería responsable

Instructor ecuatoriano Francisco Iturralde le habría ocasionado una severa lesión en la columna a Jack Greener.

En 2018, un trágico incidente en el Del Mar Jiu-Jitsu Club, California, marcó la vida de Jack Greener, un estudiante principiante de jiu-jitsu, y del instructor ecuatoriano Francisco Iturralde.

Durante una sesión de entrenamiento, Iturralde ejecutó una técnica de back take desde la posición de tortuga que resultó en una lesión devastadora para Greener.

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El movimiento, que involucró el peso total del instructor sobre el cuello de Greener, habría aplastado sus vértebras cervicales, dejándolo tetrapléjico.

En 2023, un jurado de San Diego otorgó a Greener 46 millones de dólares, suma que, con intereses, supera los 56 millones, según informó el New York Post.

Francisco Iturralde, conocido como «Sinistro” por su estilo de grappling dinámico y agresivo, es un cinturón negro de segundo grado con un historial competitivo destacado.

Nacido en Ecuador, comenzó a practicar jiu-jitsu a los 13 años y ha obtenido títulos como campeón del IBJJF No-Gi Pans en 2013 y del IBJJF European en 2014.

A pesar de su experiencia, el incidente con Greener generó controversia. Iturralde afirmó que Greener, con experiencia previa en lucha libre, intentó un movimiento simultáneo que contribuyó al accidente, aunque el jurado determinó que el instructor no minimizó los riesgos adecuadamente.

El caso, conocido como Greener v. M. Phelps, Inc., se convirtió en un precedente en la ley de responsabilidad deportiva en California.

La corte sostuvo que Iturralde, como instructor, tenía la obligación de evitar maniobras peligrosas, especialmente con un estudiante novato.

La técnica, descrita como un “Leo Vieira back take”, fue considerada de alto riesgo al ejecutarse sin control, según el testimonio del experto Rener Gracie.

La indemnización cubre gastos médicos pasados y futuros, pérdida de ingresos y dolor y sufrimiento, reflejando el impacto profundo en la vida de Greener, quien estaba a semanas de graduarse y planeaba ser instructor de surf.

A pesar de la tragedia, Jack Greener ha mostrado una notable resiliencia. Tras años de rehabilitación, ha recuperado algo de movilidad, convirtiéndose en alpinista y conferenciante motivacional.

En 2021, fue la primera persona con su lesión en escalar el Monte Whitney.

Por su parte, Iturralde expresó en redes sociales que el incidente cambió su perspectiva sobre el jiu-jitsu, defendiendo que fue un accidente fortuito.

El caso ha generado debates en la comunidad del jiu-jitsu sobre la seguridad en el entrenamiento y la responsabilidad de los instructores, subrayando la necesidad de protocolos más estrictos.

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