Luego de nueve años Juan Ramón Silva está de regreso en Emelec. En 30 años el estratega uruguayo ha entrado y salido varias veces del elenco eléctrico, pero este regreso tiene un sabor especial para él.
En 2014, Silva fue separado del conjunto millonario por decisión de Nassib Neme, entonces presidente azul. Los motivos y la forma en la que fue despedido aún lo llenan de nostalgia, ya que siente que esta fue “injusta”. Además, su salida (septiembre del 2014) dice que dolió más, debido a que se dio mientras se recuperaba de una complicada operación a la cadera.
Pero Silva no le guarda rencor a nadie y es creyente de que el tiempo pone todo en su sitio. Por eso siente que este regreso a Emelec (divisiones formativas) es especial, ya que su misión será la que más le gusta: descubrir jugadores que puedan nutrir al equipo de primera.
¿Por qué se dio su salida de Emelec?
No nos entendimos con Nassib Neme. Él pensó que estaba conspirando en su contra… Como yo era la voz cantante del grupo de formativas reclamé una deuda pendiente (4 meses de sueldo), que el club mantenía con varios entrenadores. Eso le molestó.
¿Cómo le notificaron que estaba fuera del equipo?
Ese año me tuve que operar y mientras estaba en recuperación me notificaron que estaba cesante.
¿Qué sintió en ese momento?
Sentí que me estaban dando una puñalada en la espalda.
Pasaron nueve años para regresar a Emelec ¿Cómo se dio este regreso?
Me ofrecieron venir por intermedio del presidente (de divisiones menores) Enrique Peña. Hay un proyecto serio y muy bueno en las formativas, así que cuando me pidieron regresar, no dudé dos veces en regresar a casa.
¿Pensó que este regreso se tenía que dar?
Yo no me fui bien de acá, así que sabía que tenía que regresar.
¿Cuál será su función en el equipo?
Principalmente será la de hacer asesoría en Rocafuerte (equipo filial de Emelec), pero con la obligación fundamental de ver nuevos talentos y de llevarlos al equipo principal.
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¿Se ha trazado alguna meta?
La idea es subir a cinco o seis chicos por temporada. Es mi obligación, para ayudar al equipo.
Esa labor usted la conoce a la perfección ¿Qué recuerdos tiene?
Claro, ese trabajo lo hice en su momento cuando con los otros profesores de formativas subimos a los denominados Extraterrestres (1999), en el que estaban jugadores como Daniel Viteri, Jaime Iván Kaviedes, Carlos Hidalgo, Moisés Cancelario, entre otros. Luego también tuve la suerte de subir a primera a otros futbolistas como Fernando Gaibor, Eduardo Morante, Marcos Caicedo, Enner Valencia.
¿Cuál es la clave para descubrir jugadores?
Tener buen ojo te lo dan los años de estar en el fútbol. Como entrenador busco que los jugadores tengan seis o siete condiciones como: velocidad, técnica, ubicación, dominio de balón, entre otros.
¿Cree que Emelec ha dejado de ser un club formador?
Lamentablemente sí. Con el pasar de los años esa esencia del equipo, de ser una de las principales canteras del país, se perdió.
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¿Por qué cree que se perdió esa esencia de Emelec?
Tal vez porque los dirigentes quieren resultados inmediatos y no quieren invertir en las formativas. Muchos creen que es un gasto invertir en un chico y no es así. Sino vayan a preguntarle a Independiente del Valle.
¿Independiente del Valle copió el modelo de Emelec?
Emelec fue una de las mejores canteras del país, era una de las pocas donde se hacía una buena labor en formativas. Luego surgió Independiente, no sé si copió nuestro modelo, pero este es el camino, descubrir talentos, no comprar jugadores.
¿Qué siente cuando ve a un jugador, que usted descubrió, llegar a primera?
Es una sensación indescriptible. Me sucedió muchas veces, una de las que más recuerdo fue con Enner Valencia. A él nos lo envío el ‘Papi’ (Pedro) Perlaza. Ya lo habíamos visto en un torneo de federaciones y cuando llegó a Guayaquil, Enner dormía en el Capwell, era un chico muy trabajador, luchó mucho por llegar a ser profesional. Un día Jorge Sampaoli me pidió unos jugadores. Lo envié a Valencia y a otros jugadores. Enner nunca más bajó y hoy es uno de los mejores delanteros de Sudamérica.
¿Regresó a Emelec por una revancha personal?
Regresé porque amo al equipo. No estoy acá por dinero, sino por la satisfacción de ayudar a los chicos y al club.
