En un final soñada en el Puskas Arena de Budapest, Sevilla venció a la Roma 4-1 en los penales y consiguió la séptima Europa League de su historia.
Tras un encuentro trabado e igualado, que terminó 1-1 en los 120 minutos, el trofeo se definió desde los 12 pasos.
Ocampos, Lamela, Rakitic y Montiel marcaron los tantos que desataron la algarabía de los hinchas sevillistas en Budapest.
Con este triunfo, el equipo español clasificó a la Champions League y se aseguró más de 23 millones de euros.